¿POR QUÉ HACEMOS LAS COSAS MÁS COMPLICADAS DE LO QUE SON?
¿POR QUÉ LE DAMOS IMPORTANCIA A COSAS Y PROBLEMAS QUE NO LA TIENEN Y OTRAS LAS PASAMOS POR ALTO?
¿POR QUÉ NOS OBSESIONAMOS CON ESTUPIDECES Y COMPLEJOS?
¿POR QUÉ NUESTRA CABEZA DA VUELTAS Y VUELTAS SIEMPRE A UN MISMO TEMA Y NO PONEMOS SOLUCIÓN?
¿POR QUÉ EN LA VIDA TODO TE PASA A TI?
¿POR QUÉ TU VIDA NO ES NADA PARECIDA A COMO LA SOÑASTE?
Te voy a decir el por qué, y verás que tengo razón.
Vivimos como máquinas, con el piloto automático puesto siempre. Tenemos en la cabeza solamente el sobrevivir, el buscar la manera de que ese día esté el embutido para la merienda, de que mañana puedas pagar ese recibo de la luz que se te había olvidado, de que no sabes si vas a llegar a fin de mes, de no olvidarte de sacar la ropa de la lavadora, de qué poner para almorzar porque estas harta de la comida, de si por la tarde tienes que llevar al crío a las actividades extra escolares o no, de tu trabajo, o buscarlo si no lo tienes, de él, de ella, de todo,,,,de todo menos de ti.
PÁRATE. Sólo un momento. Yo lo he hecho. Piensa. ¿Qué es más valioso que tu? ¿La familia? Por supuesto que es valiosa, y tus hijos, y tu pareja, y tu familia. Pero sin ti, todo eso no existiría. ¿Te has parado a pensar eso? Nada existiría. Hacemos felices a todos, les damos comodidad, pero no pensamos en nosotras, en nuestra vida, en nuestros hobbies, en nuestros sueños. ¡¡ Si vieras que fácil es todo cuando lo miramos con otros ojos!!
Vas a tener que seguir haciendo lo mismo, indudablemente no vas a tirar todo por la borda y sentarte en un sillón para que todo el mundo se las ventile, solamente es cambiar un poco la manera de verlo, la perspectiva con que lo haces, y lo más importante, disfrutar cuando lo haces.
Valorar y agradecer. Ese es el secreto. Valorar que tienes tiempo para hacer lo que muchísimas mujeres estarían locas por hacer, si no tienes trabajo ahora, disfruta ese tiempo que te da oportunidad de entrar y salir cuando quieras, aunque sea para hacer la compra, mirar tiendas, tomarte un cafe con una amiga/o, oír música mientras haces la comida, escucharla y sentirla, sabiendo que ese tiempo quizá mañana no lo tengas porque encuentras un trabajo que te tenga todo el día ocupada o encerrada en una oficina.
Valorar que tienes la oportunidad de sentarte y pensar en lo que quieras. Valorar que tienes un techo y una cama donde dormir. Valorar que la comida no te falta. Valorar que tienes la certeza de darle un abrazo a tu pareja o hijos cuando quieras, porque los tienes con vida.
Valorar y sobre todo agradecer. Es de bien nacido ser agradecido y el universo también lo es, cuando le agradecen.
Valora que tienes hijos, que los tienes sanos e inteligentes, que gracias a Dios, no tienen enfermedades o cualquier discapacidad, que son fruto de una relación que también creaste y que con muchos altibajos y problemas, aun sigues teniendo y disfrutando, porque gracias a ti los tienes.
Cambia la manera de ver las cosas. Quizá no tienes la vida actual que soñaste cuando eras pequeña, pero seguro que ahora mismo, no la cambiarías por nada del mundo. Y no te hablo de dinero, ni casas, ni coches, ni los viajes que soñaste, ni nada de eso.
Tú sabes de que te hablo.
Valora y agradece........todo lo demás viene en camino.
